Pintamos este bouquet de pensamientos en acuarela empezando por seleccionar la paleta de color, pintando pétalo a pétalo, y añadiendo hojas y ramas.
Para este bouquet de flores, escogí como color principal el rojo. Y dentro de ese color utilicé diferentes tonos y variaciones.

Paso 1. Primera capa pensamientos en acuarela
Empezamos con una capa de color suave, muy aguada. Aquí lo que buscamos principalmente es definir las zonas donde van a haber sombras y donde va a haber luz en el pétalo. Si tenéis dudas de cómo añadir luces y sombras, en el espacio de las musas tenemos una clase dedicada específicamente a esto clase luces y sombras, para que podáis saber siempre cómo conseguir esa tridimensionalidad en cualquier elemento.
Es muy importante que no sea una mancha plana, sino que haya zonas con más color, con menos intensidad, incluso con transparencia del blanco del papel.
Entre una flor y otra, cambiamos de tono, de color, para que no queden todas las flores iguales.
Repetimos esto en todos los pétalos, dejamos secar bien y vamos con la segunda capa.

Paso 2. Segunda capa pensamientos en acuarela
Aquí vamos ya con colores intensos, porque será el color final que tendrá la flor.
Seguiremos trabajando en húmedo sobre seco y lo que hacemos es intentar repetir el patrón que hemos definido en la primera capa, de forma que en las zonas que está más oscuro aplicaremos más intensidad de color y donde está más claro, iremos degradando con agua.
Para tener más precisión, cambié a un pincel más pequeño. Estoy usando el pincel para acuarela de Van Gogh número 2.
Repetimos en cada pétalo, acordándonos de cambiar un poco el color o los matices para que no queden todas las flores iguales entre sí.
Dejamos secar la acuarela por completo y vamos con la siguiente etapa.

Paso 3. Detalles de los pétalos de la flor en acuarela
Cambio de pincel para hacer líneas bien finas (estoy utilizando un pincel delineador para acuarela marca Daler Rowney).
Dibujamos líneas finas que empiezan en la parte del nacimiento del pétalo.
En este punto diría que lo más importante es que las líneas no sean rectas, sino que sigan un poco la curvatura natural que tiene cada pétalo.
Una vez que tenemos todos los detalles terminados y que la acuarela está seca, vamos con los tallos y las hojas.

Paso 4. Tallos y hojas del bouquet de pensamientos en acuarela
Voy a utilizar dos tonos de verde, uno más claro y otro más oscuro.
Aquí, una vez más, lo importante es definir las zonas donde queremos que haya luz y donde queremos que haya sombra. Esta es la forma en que nos aseguramos que no nos queda algo plano, sino que nos queda un efecto de volumen.
Las hojas las vamos a pintar utilizando la técnica de húmedo sobre húmedo.
Para eso aplicamos una capa de verde claro y estando aún húmedo, añadimos toquecitos del color verde oscuro.
Terminamos de pintar las hojas, dejamos secar bien y vamos con la última parte que es añadir los detalles de las ramitas.

Paso 5. Ramas y detalles de relleno del bouquet
Esta es probablemente la parte más fácil, simplemente añadimos puntitos a lo largo de las ramas.
El único criterio que he seguido es que la parte de la base es más ancha que el extremo final de la rama.
E intercalo un poco de amarillo con un poco de naranja.

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